El curso ha llegado a su fin y yo he sentido una mezcla de alivio y uf, ¡socorro! Y es que hemos entrado en las vacaciones “a tope de power”, desde hace días, mis hijos duermen poco, se acuestan tarde y se despiertan muy pronto (hora solar) y van tan pasados de rosca que la situación se vuelve muy difícil de manejar. Como nosotros también estamos durmiendo menos y mal nuestro humor y paciencia se han reducido a la mínima potencia. En resumen, una entrada triunfal, celebrando el verano por todo lo alto.
Por una parte cuando acaba el curso nos relajamos un poco. Se acaban las prisas matutinas, el tener que dejarlo todo preparado la noche anterior, los momentos de “no quiero ir al cole” .
También deseamos que llegue ese momento para que ellos descansen, desconecten y jueguen, que es a lo que tienen que dedicarse a esta edad.
Se merecen un buen parón porque este año han trabajado mucho y se han esforzado a tope. La evolución ha sido espectacular.
Estamos muy orgullosos de lo que han conseguido por sí mismos. Y aunque irán a escuela de verano durante la mitad de las vacaciones, sabemos que hay otra mitad que serán vacaciones, además de muchas más horas juntos de lo habitual, que genera un poco de ansiedad. Ya se sabe, cuanto más tiempo pasamos juntos, más roce y más conflictos que gestionar. Eso sumado a que se reducen nuestros espacios de autocuidado, se convierte en el detonante de los rifirrafes.
Lo reconozco, le temo al verano.
Cada año me pasa igual y después pasa el verano y no ha sido para tanto.
Creo que el secreto radica en hacer muchas cosas con ellos. Planificar e intentar permanecer en casa el menor tiempo posible.
En el cole nos suelen dar una lista de cosas que hacer en verano y está muy bien para tener algunas ideas e ir tachando lo que vamos haciendo.
Os cuento algunos ejemplos:
- ir al cine,
- ir a unas fiestas de verano,
- comer un helado,
- ir a la playa,
- bañarse en la piscina,
- hacer una guerra de globos de agua,
- mirar las estrellas,
- preparar un bizcocho,
- leer un libro/ leer o mirar un cuento,
- recolectar moras,
- ir de viaje,…
¿Me ayudáis a seguir con la lista?
Así entre todos hacemos del verano una época para disfrutar juntos, intentando quitarnos el miedo a pasar más horas en familia.
Vanessa Ojeda
[…] cada verano es así y lo superamos, aunque cada año se hace más complicado encontrar cosas que les apetezca hacer a los niños. Que […]