Pecamos de ignorantes cuando pensamos que nuestra felicidad depende de lo que tenemos o no tenemos.
Creemos que llegar a poseer aquello que tanta ilusión nos hace nos hará felices. Y cuando al fin lo logramos, entonces necesitamos otra cosa, y luego otra y así hasta el infinito.
La felicidad, como la motivación, es algo que depende fundamentalmente de nosotros. Es el bienestar que nos proporciona la consecución de unos objetivos personales derivados de motivaciones intrínsecas o identificadas.
El logro de estos objetivos requiere de esfuerzo y la práctica proporciona la oportunidad de satisfacer necesidades como la competencia, la autonomía y la relación, y en consecuencia un mayor bienestar.
¿Y cuáles son esos objetivos?
En cada persona son unos distintos, pero en la mayoría de nosotros habitualmente se repiten los que tienen relación con:
- una buena relación con la familia y amigos,
- ejercicio físico,
- placer,
- ayuda y generosidad,
- amabilidad y empatía,…
¿De qué depende principalmente?
De nuestras expectativas, deseos, o metas.
¿Qué ocurre con la maternidad? ¿Somos felices desde que somos madres?
Habrá muchas mujeres que dirán que sí pero otras se habrán sentido abrumadas por esta nueva situación.
Sí, a mí me pasó. Me vi sobrepasada. Todo era nuevo, no sabía a qué me enfrentaba. Ignorancia o falta de información, sumado a la expectativa peliculera (que todo tiene que ser color de rosa) provocaron en mí un estado constante de queja, de malestar. Nadie entendía lo que le pasaba a mis hijos porque no tenía a mi alrededor madres recientes que me dijeran que los bebés lloran, tienen crisis de lactancia, no quieren separarse de sus madres, ni dormir en su cuna.
Cada día me frustraba intentando perseguir un modelo social que nada tenía que ver con mi necesidad interna. Cuando empecé a escucharme y a actuar teniendo en cuenta mi instinto, todo empezó a mejorar.
¿Qué nos hará felices como madres?
Sentirnos felices para proyectar esa felicidad en nuestros hijos.
Y eso no significa estar pletóricas constantemente, sino sentir el bienestar que proporciona la consecución de nuestros objetivos y deseos.
¿Cómo lograrlo?
A base de esfuerzo. La felicidad está dentro de nosotros. Autoconócete para descubrirla.
Vanessa Ojeda