Hace unas semanas hablé de cómo había sido el destete de mis dos hijos y hoy quería hablaros del destete parcial porque hay muchas mamás que llegan a un momento de su lactancia en el que se sienten agobiadas ya sea por la alta demanda, por sentimientos contradictorios, por molestias, que pueden llegar a producir la agitación por amamantamiento (sentimientos de rechazo que afloran repentinamente en la madre lactante hacia su hijo), porque desean quedarse embarazadas o simplemente porque ya no desean seguir adelante con la lactancia.
Durante estas etapas, muchas mamás se sienten exhaustas y se plantean destetar a sus hijos. La lactancia es cosa de dos y si ambas partes no están de acuerdo, y según la edad del hijo, puede resultar harto complicado.
A veces el objetivo resulta ser algo inaccesible. Puede ser algo así como empezar a entrenar para correr y querer participar en una maratón a las pocas semanas.
Quizás lo consigas pero, sin una preparación previa y entrenamiento, las consecuencias pueden ser difíciles de sobrellevar.
Algunas ideas para destetar podrían ser:
- Reducir, aplazar o acortar tomas,
- Sustituir momentos clave de algunas tomas por otras actividades que pueden interesar al niño,
- Que papá o algún familiar cercano o amigo le acompañen en momentos que te suela pedir (al ir a dormir, durante la noche, al despertarse, al llegar mamá del trabajo, a la recogida de la guardería o colegio,…),
- Acudir a grupos de apoyo para conocer ideas de otras madres que han pasado por lo mismo.
Además, entre las ideas para destetar, no olvidemos que existen objetivos alcanzables, como por ejemplo, el destete parcial.
Tal vez el niño no pida pecho durante el día o sean poquitas tomas, pero se pasa la noche mamando y eso resulta agotador.
Podemos plantearnos destetar solo de día o solo de noche.
Ayuda mucho contar con el programa padre. Si se colecha, que duerma papá con él, que cuando el niño se despierte acude papá, sustituir la toma de pecho por agua, leche o comida, contar un cuento, cantar, hacerle caricias,…
Es probable que el niño no esté de acuerdo, pero pasadas unas cuantas noches, se dará cuenta que esta es la nueva rutina y que debe aceptarla. Eso sí, necesitará muchos besos, abrazos y atención que compensen esos momentos de cercanía y contacto que han desaparecido.
Es posible que pequeños retos alcanzables hagan que la prolongación de la lactancia no resulte tan dura. Son algunas ideas que planteo. Si os sirven de ayuda, genial, si no es el caso porque estáis decididas a destetar pues desearos mucho ánimo en vuestra aventura y daros la enhorabuena por todo vuestro recorrido en la lactancia.
Vanessa Ojeda