A veces da miedo ser consciente de lo rápido que olvidamos muchas cosas.
Recuerdos que se pierden en algún lugar de nuestra mente y que de repente salen a la luz.
Digo esto porque nuestro hijo pequeño hace algún tiempo que empezó a llamar a todo el mundo tonto, después añadió marrano y por último caca.
Llegando así a crear frases como “tonto marrano”, “caca apestosa” y últimamente le hemos ayudado a crear “vaca apestosa con cara de ventosa”.
Mi primera reacción fue recriminar el uso de estas palabras, luego intenté buscar alternativas para sustituirlas y finalmente acabé uniéndome a él para decir auténticas frases que pasarán a la historia.
Yo ya no recordaba que mi hijo mayor hubiera pasado por esto (que seguro que sí pero mi memoria selectiva no me lo deja ver), pero llegó un momento en que me dije a mí misma que esto debía ser una fase. Hice mis pesquisas y así es.
Entre los 3 y 5 años (Ernest tiene 4) suele darse una fase en la que los niños empiezan a conocer palabrotas, o términos relacionados con su cuerpo, genitales, etcétera y los usan a menudo para llamar la atención de los adultos. Es la fase escatológica. La etapa del famoso “caca, culo, pedo, pis”.
¿Qué podemos hacer?
- Vivirlo con naturalidad,
- saber que pasará,
- buscar algunas palabras alternativas,
- dejarle claro en qué momento no debe usar ese lenguaje o delimitar zonas donde puede usarlo,
- sobrellevarlo con humor,
- unirnos a él para acompañarlo.
Y así fue como empezamos a idear tremebundos platos a la hora de cenar: pipí de elefante de primero, mocos de dinosaurio de segundo y hormigas con chocolate de postre.
Después escuchamos a todas horas “tonto marrano”.
Y por último intentamos convertir la “caca apestosa” en una “vaca apestosa con cara de ventosa”.
Ahora, como su hermano lo anima a decir muchas burradas, a veces me uno a ellos y suelto de todo para relajar el ambiente. Hay días en los que se hace pesado, pero sabiendo que es una fase más y sobrellevándolo con humor, será más fácil de superar. Seguro que en unos años ya no recordaré esta fase “excrementosa” (ji, ji).
Vanessa Ojeda
Deja una respuesta